Casa Xan es una de las ganaderías que forma parte de la delegación de Chantada de AIRA. Esta granja familiar la conforman José Luis Rodríguez, su mujer María Dolores Tumbeiro y su hijo Juan Rodríguez, que será el encargado de recoger el relevo generacional.
La ganadería, localizada en Vilar (Adá, Chantada), cuenta con unos 140 animales en total, de los cuales 65 están en ordeño; el resto son vacas secas y recría. Su producción media se encuentra en los 40 litros por vaca y día, con unas calidades medias de 3,25 % de proteína y 3,90 % de grasa. En cuanto al recuento celular se encuentra, por lo general, por debajo de las 130.000 células somáticas. En el pasado año, entregaron a la cooperativa un total de 807.322 litros.
En cuanto a la base territorial, disponen de unas 32 hectáreas en las que siembran maíz y hierba. En concreto, siembran 13 hectáreas de maíz que rotan cada dos años. En estas labores, cuentan con el servicio de AIRA para la recogida del maíz.
La granja lleva toda la vida en funcionamiento, como afirma José Luis «yo no necesité ningún curso, ya que nací aquí y me formé desde bien pequeño». Cuando empezó, el número de animales era mucho menor «y poco a poco, fuimos creciendo, comprando más terrenos y también más animales hasta llegar a como estamos hoy».
Desde hace seis años, su profesionalización y mejora en la calidad del trabajo los llevó a incorporar el robot: «Fue lo mejor que pudimos hacer, es una gran inversión, pero merece la pena por la calidad de vida nuestra y también por los animales». Con la finalidad de potenciar el bienestar animal también incorporaron los collares para la detección de celos, «que son muy recomendables» por la información que les ofrece. Asimismo, cuentan con el arrimador de comida y unas instalaciones muy ventiladas, con cortinas que suben y bajan según la temperatura para «ofrecerle a los animales el mejor bienestar».
La producción media se encuentra en los 40 litros por vaca y día, con unas calidades medias de 3,25 % de proteína y 3,90 % de grasa
Su objetivo es «mantenernos como estamos», siempre cuidando la genética «porque es muy importante cuando dispones de un robot», indica el ganadero y añade que «si tienes animales que no son funcionales, no le sacas el rendimiento al robot». En cuanto a producción considera que no necesitan aumentar más. Juan resalta que si hubiesen querido ampliar serían necesarias más instalaciones y «ahora mismo no tenemos espacio para hacer las ampliaciones». Ambos coinciden en que así «estamos muy bien».